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Estrategia de Paisaje del Mar Menor

La Estrategia de Paisaje del Mar Menor se redacta de acuerdo con lo establecido en el Art.14 de la Ley 3/2020 de 27 de julio, de recuperación y protección del Mar Menor. 

Los objetivos generales de la Estrategia serán: 

  • Que el paisaje sea reconocido como expresión de la diversidad del patrimonio natural, cultural, residencial y productivo del Mar Menor y el Campo de Cartagena. 
  • Aplicar políticas de protección, gestión y ordenación del paisaje. 
  • Establecer procedimientos de participación pública. 
  • Integrar el paisaje en las políticas de ordenación territorial y urbanística. 

 

Las premisas básicas en las que se basa la Estrategia son las siguientes: 

  1. Paisaje como herramienta: El paisaje es considerado por la Estrategia como herramienta para la consecución de objetivos; no se busca un paisaje determinado como finalidad del proceso, la finalidad es analizar y establecer criterios y procesos necesarios para la materialización de la posible aportación del paisaje a la resolución de problemas y al aprovechamiento de oportunidades y potencialidades. 
  2. Paisaje para las personas: El tratamiento y consideración del paisaje en la Estrategia busca la creación de sensaciones positivas en las personas que lo habitan o visitan, la mejora de dicha experiencia sensorial. 
  3. Participación y coordinación: Se requiere como elemento clave una amplia participación pública, el instrumento debe dar respuesta a los requerimientos, inquietudes y demandas de la sociedad en general y de los distintos agentes que inciden o pueden incidir en el paisaje. 

 

Partiendo de dichas premisas básicas, se establecen los siguientes objetivos específicos

  1. Mejora de la calidad de vida: Tanto de los habitantes de hecho del ámbito, que implicará una mejora de las condiciones de vida que permitirá fijar población en el área y por tanto tender a la ruptura de la estacionalidad; como de los visitantes o turistas, que experimentarán de esta forma una sensación positiva que afianzaría la zona como destino de calidad. 
  2. La sostenibilidad ambiental y económica: El paisaje debe contribuir al mantenimiento de los numerosos valores ambientales existentes; así mismo debe colaborar en la consecución de un sistema socioeconómico económicamente sostenible. 
  3. Imagen de marca: La situación presente tanto del turismo como de la agricultura de la zona necesita la creación de una imagen de marca que invierta la tendencia actual; el paisaje se manifiesta como una gran oportunidad para ser utilizado como herramienta para la consecución de dicho objetivo.

 

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